JPMorgan finalmente permitirá a sus clientes comprar Bitcoins

Jamie Dimon, CEO de JPMorgan Chase, anunció que el banco permitirá a sus clientes invertir en bitcoin, reafirmando al mismo tiempo su escepticismo personal hacia la cripto. Esta postura paradójica del gigante bancario se produce mientras varios estados de EE.UU. integran bitcoin en sus reservas estratégicas. ¿Hasta dónde llegará esta adopción institucional que ni siquiera los mayores detractores pueden ya ignorar?

Jamie Dimon autoriza Bitcoin en JPMorgan mientras mantiene su escepticismo

El 19 de mayo de 2025, durante el Día Anual de Inversores de JPMorgan Chase, Jamie Dimon tomó una decisión comercial importante a la vez que mantenía sus reservas personales. El CEO anunció oficialmente que el banco permitirá ahora a sus clientes comprar bitcoin, aclarando, no obstante, que la entidad no se encargará de la custodia directa del mismo.

Esta decisión forma parte de una estrategia para adaptarse a las demandas de los clientes, a pesar de las reservas personales del dirigente.

«No soy fan de Bitcoin«, declaró Dimon sin ambigüedades durante esta presentación.

Su escepticismo no es nuevo. En una entrevista concedida a CBS News en enero de 2025, fue aún más categórico:

Bitcoin en sí mismo no tiene ningún valor intrínseco. Es ampliamente utilizado por traficantes sexuales, lavadores de dinero y ransomwares.

Esta posición crítica no impide que el CEO reconozca la libertad de elección de sus clientes.

«Aplaudo su capacidad para querer comprar o venderlo. Así como creo que tienen el derecho a fumar, pero no creo que deberían hacerlo.«, añadió con una comparación provocadora que ilustra perfectamente su posición ambivalente.

Los analistas de JPMorgan son más optimistas ante la creciente adopción institucional

A diferencia de las reservas de Jamie Dimon, los analistas de JPMorgan se muestran optimistas sobre el futuro de bitcoin. Sus estudios recientes prevén que la cripto continuará imponiéndose frente al oro durante el segundo semestre de 2025, impulsada por una creciente demanda institucional.

«Entre mediados de febrero y mediados de abril, el oro avanzó a expensas del bitcoin. Sin embargo, en estas últimas tres semanas, hemos observado el fenómeno inverso: el bitcoin gana terreno respecto al oro«, explican claramente los expertos del banco.

Las cifras confirman esta tendencia: desde el 22 de abril, el oro perdió cerca de un 8 % de su valor, mientras que bitcoin registró una subida impresionante del 18 %.

La adopción también se intensifica a nivel gubernamental. New Hampshire autorizó la asignación del 5 % de sus reservas en bitcoin, mientras que Arizona creó una reserva dedicada comprometiéndose a mantener su política fiscal actual.

En el sector privado, empresas como Strategy y Metaplanet aumentan constantemente sus tenencias en bitcoin.

Los analistas de JPMorgan califican esta multiplicación de adoptantes institucionales como un «catalizador positivo sostenible» para bitcoin. Anticipan que la competencia entre oro y bitcoin continuará hasta finales de 2025, con una probable ventaja para la cripto.

Esta evolución ilustra perfectamente el dilema de las finanzas tradicionales: incluso las instituciones más reacias deben hoy adaptarse al creciente interés por bitcoin, que se impone gradualmente como un activo imprescindible en el panorama financiero mundial.