Pi Coin bajo presión técnica pese a señales de repunte

En un mercado cripto marcado por la espera, Pi Network tiene dificultades para iniciar una verdadera recuperación. Lejos de sus inicios prometedores, el activo ahora se mueve entre niveles de consolidación y señales técnicas mixtas. Algunos indicadores muestran una mejora en los flujos, pero sin un cruce claro de los umbrales clave. El momentum sigue siendo frágil y la presión de venta latente. Entre un apoyo tímido de los inversores y la ausencia de un catalizador fuerte, Pi atraviesa una fase de incertidumbre prolongada. Persiste el riesgo de estancamiento técnico.

Señales técnicas críticas

Pi Network sigue fascinando a millones de inversores a pesar de las críticas. Mientras que la criptomoneda se cotiza actualmente a 0,228 $, los indicadores técnicos revelan una situación frágil y tensa.

De hecho, el activo se negocia a 0,228 USD, en una fase de consolidación entre 0,229 USD y 0,217 USD, mientras que los inversores esperan flujos entrantes más sólidos para esperar una recuperación duradera.

En otras palabras, a pesar de mantener un soporte sólido en 0,217 $, el mercado sigue indeciso, incapaz de superar la resistencia inmediata en 0,229 $. La tendencia es aún más preocupante porque una de las principales herramientas para analizar el momentum, el Squeeze Momentum Indicator, muestra un deslizamiento hacia una señal bajista.

De manera más precisa, los indicadores revelan :

• Un bloqueo técnico bajo la resistencia de 0,229 $, umbral crítico que los compradores aún no han logrado superar ;

• Una consolidación lateral entre 0,229 $ y 0,217 $, signo de un mercado a la espera de una señal fuerte ;

• Un riesgo de presión vendedora aumentada, señalado por el Squeeze Momentum Indicator ;

• Una falta de volúmenes suficientes, frenando cualquier impulso alcista claro.

En ausencia de un detonador, la configuración actual podría abrir la puerta a un retorno de la presión vendedora, especialmente si el histograma técnico comienza a imprimir barras rojas, indicadoras de un desequilibrio a favor de los vendedores. El nivel de 0,217 $ funciona como el último bastión. Su ruptura podría reactivar una fase bajista.

Un repunte posible, siempre que los flujos entrantes crucen un umbral crítico

Más allá de las tensiones en el momentum, el análisis del flujo de dinero y los datos on-chain ofrece una lectura complementaria de la situación, con señales ciertamente tímidas, pero portadoras de cierto optimismo condicional.

El Chaikin Money Flow (CMF), indicador que mide el equilibrio entre las entradas y salidas de capital, muestra un ligero progreso en los últimos días, traduciendo una mejora en las entradas de dinero fresco.

No obstante, el indicador sigue por debajo de la línea cero, lo que significa que las salidas de capital siguen siendo, por ahora, superiores a las entradas. Esta precisión es esencial, porque mientras el CMF no sea positivo, la presión vendedora continúa dominando estructuralmente los intercambios.

Este umbral de neutralidad del CMF, situado en la línea cero, funciona como un detonador potencial para una inversión de tendencia. Si llegara a ser superado de manera sostenida, indicaría una acumulación progresiva por parte de los inversores, paso indispensable previo a una recuperación de los precios.

En este escenario, una ruptura de la resistencia actual en 0,229 $ podría liberar un impulso alcista hacia la zona de 0,246 $. Tal progreso abriría la puerta a un rally. Sin embargo, esto está condicionado a una mayor participación del mercado. Por ahora, los volúmenes son demasiado bajos para validar tal reversión.

A mediano plazo, el futuro del precio de Pi Network depende directamente de la capacidad del mercado para restablecer flujos entrantes suficientes. Sin esta dinámica, el activo corre el riesgo de estancarse duraderamente en una fase de lateralización, o incluso de caer nuevamente en caso de una reversión global del mercado cripto. En cambio, una mejora del CMF y una ruptura técnica por encima de la resistencia actual podrían señalar un cambio de régimen, impulsando a Pi hacia una zona de valoración más favorable.