En agosto, los mineros de bitcoin generaron ingresos cercanos a 1,65 mil millones de dólares, un nivel prácticamente idéntico al de julio. Este mantenimiento refleja una resiliencia impresionante del sector, a pesar de un contexto marcado por el aumento de los costos y la presión energética. Pero detrás de esta estabilidad aparente se ocultan fragilidades estructurales que plantean preguntas: ¿el modelo actual de minería puede realmente sostenerse a largo plazo?