La elección de Trump fractura la comunidad cripto

La cripto atraviesa una fase contrastante. La elección de Donald Trump, aunque fue recibida con entusiasmo por parte de la comunidad, no elimina las tensiones. El Bitcoin y varios altcoins han aumentado, impulsados por la promesa de un futuro amigable con la cripto. Sin embargo, los desacuerdos persisten: entre esperanzas de una regulación clara y divisiones ideológicas, el panorama sigue siendo complejo. Sumergidos en las turbulencias de una comunidad fracturada.

Las promesas de Trump y la división cripto

Donald Trump ha sabido avivar el debate durante su reelección, especialmente gracias a promesas ambiciosas sobre los criptoactivos. Para muchos inversores y entusiastas, su llegada al poder representa una oportunidad: regulaciones potencialmente favorables y adopción acelerada de tecnologías blockchain.

Konstantin Richter, CEO de Blockdaemon, resume bien esta dinámica:

« La cripto es para todos. Da voz a cada uno. »

No obstante, no todo es tan sencillo. Margaret Rosenfeld, abogada especializada, señala que varios miembros de la comunidad cripto no han podido ignorar otros aspectos controvertidos de la política trumpiana. Estos desacuerdos se han traducido en enfrentamientos virulentos en las redes sociales, especialmente en X.

Algunos hechos notables:

• Los tweets pro-Trump acusando a los demócratas de ser anti-cripto han suscitado intercambios ácidos;
• La campaña «crypto para Harris» fue atacada por los republicanos, mostrando la creciente polarización;
• Algunos decepcionados incluso se han vuelto hacia Bluesky, una plataforma alternativa en auge.

Lejos de la unidad, estas divisiones ilustran una paradoja: Trump cataliza tanto el entusiasmo como las tensiones dentro de la comunidad cripto.

Bitcoin: ¿hacia un futuro bipartidista o politizado?

La elección de Trump ha puesto de relieve un problema principal: la politización del bitcoin. Según Natalie Smolenski, fundadora de la Texas Bitcoin Foundation, el aumento del precio del BTC refleja una confianza de los inversores en las políticas económicas republicanas.

Pero esta dinámica plantea una pregunta crucial: ¿la cripto puede permanecer apolítica?

Para Dennis Porter, CEO de Satoshi Action Fund, la respuesta es clara. Durante esta elección, candidatos opuestos al Bitcoin han perdido en gran medida debido a su posición.

« Los electos deben entender que la oposición a la cripto podría costarles caro », advierte.

Sin embargo, la politización excesiva podría volverse en contra de la industria. Smolenski alerta: « Convertir el Bitcoin en un tema partidista crea enemigos donde podría haber aliados. »

Paul Ryan, ex-presidente de la Cámara de Representantes, concuerda:

« Los demócratas se han equivocado sobre la cripto. Su ideología ha malentendido las expectativas del país. »

Crypto was literally free real estate for democrats and they let Trump have it.

Not only did they not pivot – they let Gary Gensler send another crypto Wells Notice 6 days out from the election.

Just dumb.

Democrats lost because they forgot how to build coalitions.

— RYAN SΞAN ADAMS – rsa.eth 🦄 (@RyanSAdams) November 6, 2024

Estas críticas acentúan la idea de que el bitcoin, aunque universal en su esencia, sigue siendo instrumentalizado con fines políticos.

En resumen, si Donald Trump abre nuevas perspectivas para la cripto y propulsa el bitcoin a niveles sin precedentes, permanecen incertidumbres. La sostenibilidad de esta «magia» dependerá de otros factores esenciales: valoraciones elevadas, tensiones geopolíticas y regulaciones por venir. Una cosa es segura: el camino hacia una adopción masiva estará lleno de obstáculos, pero también de oportunidades.