SwissBorg acaba de sufrir uno de los hackeos más destacados del año. En pocas horas, 193 000 SOL, es decir, 41 millones de dólares, fueron sustraídos mediante una vulnerabilidad en la API del validador Kiln, proveedor encargado del staking en Solana. No fue la infraestructura de SwissBorg la que falló, sino la de un socio externo. El incidente reaviva el debate sobre la seguridad de las integraciones externas en un sector donde la menor falla puede ser suficiente para colapsar toda la cadena.