Cuando la Reserva Federal opta por la inacción, los mercados tambalean. Al mantener sus tasas sin cambios este miércoles, el primer banco central del mundo cumplió con las expectativas, sin apaciguar las tensiones. Así, entre una inflación persistente, un consumo en desaceleración y las incertidumbres sobre el empleo, el mensaje de la Fed sigue siendo deliberadamente confuso. Esta estrategia de dilación aumenta la inquietud en los mercados financieros y alimenta las especulaciones, especialmente en el universo cripto, donde cada palabra de Jerome Powell es observada como un indicador crucial.