Mayo de 2025. El bitcoin navega más allá de los 103,000 dólares, pero esta cifra, a simple vista vertiginosa, podría ser solo un calentamiento. Porque tras bambalinas, se establece un desequilibrio estructural: la oferta se derrite como nieve al sol, mientras que la demanda institucional se dispara. Algunos ya hablan de un punto de no retorno. Otros, como Bitwise o Strategy, apuestan por una explosión de precios —hasta 200,000 dólares antes de que termine el próximo año. ¿Mito o mecanismo inevitable? Lo que es seguro es que la carrera ha comenzado y que las apuestas son colosales.