La red Bitcoin nunca ha sido tan potente. Su dificultad de minería acaba de alcanzar un récord absoluto de 142,3 trillones, un aumento del 29,6 % desde enero. Esta cifra refleja tanto el crecimiento del hashrate como la creciente presión sobre las empresas mineras. Mientras la blockchain se fortalece frente a posibles ataques, las exigencias técnicas y económicas imponen una selección cada vez más rigurosa entre los actores del sector.