A comienzos de octubre de 2025, el Bitcoin (BTC) confirma su resurgimiento como «oro digital». Mientras el metal precioso pulveriza sus récords a 3.895 dólares la onza, el BTC se dispara y supera los 118.000 dólares, reavivando una correlación que podría redefinir las estrategias de inversión mundiales. Tras meses de divergencia, ambos activos finalmente evolucionan al unísono… Pero, ¿por qué ocurre esta sincronización ahora y qué significa para los mercados?