El panorama económico mundial está evolucionando rápidamente, impulsado por alianzas que reflejan las ambiciones de los países emergentes de remodelar los centros de influencia tradicionales. En este contexto, Nigeria, la principal potencia económica de África, se ha unido al círculo de socios de BRICS. Esta iniciativa, orquestada bajo la presidencia de Brasil, subraya la voluntad de este bloque de promover una cooperación fortalecida entre las naciones del Sur global. Aunque esta asociación aún no otorga un papel decisional a Nigeria, refleja una dinámica creciente de integración económica y una búsqueda común de soberanía financiera frente a los modelos occidentales dominantes.