Mientras la incertidumbre persiste en el mercado de criptomonedas, Ethereum se distingue por una dinámica que atrae la atención. Impulsado por un retorno masivo de capitales institucionales, sólidos indicadores on-chain y una configuración técnica favorable, el activo parece listo para desafiar la resistencia de los 2,000 dólares. Frente a una volatilidad siempre presente, el ETH recupera un lugar central en las estrategias de inversión, respaldado por señales convergentes que los operadores de mercado no pueden ignorar.