Microsoft, gigante mundial del sector tecnológico, considera la posibilidad de invertir en Bitcoin. Esta propuesta, que se someterá a votación en la próxima asamblea general de accionistas en diciembre de 2024, llama la atención de todo el ámbito financiero y de los mercados cripto. Si se aprueba, el gigante de Redmond se convertiría en uno de los mayores inversores institucionales en cripto, uniéndose así a actores como Tesla y MicroStrategy. Sin embargo, detrás de este anuncio se esconde una estrategia compleja que el consejo de administración parece no adoptar completamente.