Hay umbrales psicológicos en la vida, como los 30 años, los 100 kilos o, para la cripto ETH, los 1900 dólares. El primero parece inofensivo, el segundo preocupa, el último hace temblar los mercados. Sin embargo, todos provocan agitación. Mientras el mercado cripto finge estar somnoliento, Ethereum ha elegido este momento preciso para superar esta barrera. ¿Un despertar? ¿Un sobresalto? Quizás ambas cosas. Pero una cosa es segura: en un universo dominado por Bitcoin, Ethereum ha decidido recordar que es mucho más que un simple número dos.